Dirigida por Guy Ritchie, esta adaptación de un cuento clásico quiso ser una saga pero su rendimiento en taquilla no lo permitió.
Si hay algo que Hollywood adora es reinventar las leyendas clásicas, y pocas han sido tan revisitadas como la del Rey Arturo. Entre las múltiples versiones que han llegado a la gran pantalla, hay una que destaca por su particular visión de esta historia. Dirigida por Guy Ritchie en 2017, esta adaptación se aleja de las versiones más tradicionales para ofrecernos un mix de acción, fantasía y el inconfundible estilo visual del director británico.
'Rey Arturo: la leyenda de Excalibur': Una leyenda con twist
Ritchie transforma la conocida historia del joven que extrae la espada de la piedra en una narrativa de venganza y ascenso al poder. Charlie Hunnam interpreta a Arturo, un joven criado en los barrios bajos de Londinium (la Londres romana) que desconoce su origen real. Cuando el destino lo lleva a empuñar Excalibur, se ve obligado a enfrentarse tanto a su pasado como al tiránico rey Vortigern, interpretado por Jude Law.
Esta versión no tiene mucho que ver con las representaciones clásicas del ciclo artúrico. Aquí no encontramos a un caballeroso Arturo rodeado de nobles compañeros en una corte idealizada, sino a un protagonista callejero, astuto y reticente a aceptar su destino, más cercano a un antihéroe moderno que al mítico rey.
Los seguidores del director de Snatch y Sherlock Holmes reconocerán inmediatamente su estilo: montajes rápidos, diálogos ingeniosos, escenas de acción coreografiadas con precisión y ese humor particular que caracteriza sus producciones. Las secuencias de acción también son espectaculares, especialmente aquellas donde Arturo maneja Excalibur con todo su poder. De hecho, algunos momentos recuerdan más a un videojuego de fantasía que a una película de época.
Un reparto que sostiene la aventura
Charlie Hunnam (conocido por Sons of Anarchy) aporta carisma y presencia física a este Arturo callejero, mientras que Jude Law asume el papel de villano. El reparto se completa con rostros como Djimon Hounsou, interpretando a Sir Bedivere, y Àstrid Bergès-Frisbey como una misteriosa maga sin nombre.
El mundo creado por Ritchie está más cerca de obras como El Señor de los Anillos que de las interpretaciones históricas de la Bretaña post-romana. Esta apuesta por la fantasía desbordante polarizó a la crítica y al público. Para algunos, fue una traición al espíritu de las leyendas artúricas, mientras que otros apreciaron este enfoque fresco.
Un intento de franquicia truncado
Concebida inicialmente como el inicio de una saga de seis películas, los resultados en taquilla no acompañaron estas ambiciones. La película no alcanzó las expectativas comerciales, lo que dejó en el aire las secuelas planificadas.
A pesar de su irregular recepción, Rey Arturo: la leyenda de Excalibur permanece como una reinterpretación audaz que, si bien puede no satisfacer a los puristas, ofrece 126 minutos de entretenimiento para quienes buscan una aventura medieval con un enfoque diferente y mucha adrenalina. ¿Dónde verla? Está disponible en Max.