En un movimiento que ha puesto a temblar tanto a los fans de Stranger Things como a los seguidores de Panem, Maya Hawke ha sido confirmada como Wiress en Hunger Games: Sunrise on the Reaping, la nueva precuela cinematográfica basada en la segunda novela de Suzanne Collins. Sí, la misma Hawke que se robó el corazón del público como Robin Buckley en Hawkins ahora salta a un universo donde el peligro no se esconde en portales interdimensionales, sino en un sistema político diseñado para devorar a los suyos.
La historia nos lleva 24 años antes de los eventos protagonizados por Katniss Everdeen, justo en la mañana del sorteo del Segundo “Quarter Quell”, la edición número 50 de los Juegos del Hambre. Es una Panem más joven, pero igual de feroz, marcada por un Capitolio que decide duplicar la crueldad: 48 tributos entrarán al campo de batalla, el doble de lo habitual, en un espectáculo que promete dejar cicatrices profundas.
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En el centro del relato estará Haymitch Abernathy, interpretado ahora por Joseph Zada, un joven ingenioso y mordaz del Distrito 12 que será arrojado a una arena más despiadada que nunca. Para quienes recuerdan a Woody Harrelson en la saga original, esta será la oportunidad de explorar su leyenda desde cero: cómo sobrevivió, qué perdió y por qué terminó convertido en ese mentor cínico, pero brillante, de Katniss y Peeta.
Maya Hawke se une así a un reparto estelar que incluye a Whitney Peak, Mckenna Grace, Jesse Plemons y Kelvin Harrison Jr. Su personaje, Wiress, es una antigua campeona convertida en mentora, famosa entre los lectores por su inteligencia casi sobrenatural y por cierta fragilidad que esconde un talento estratégico temible. No es casualidad: Hawke tiene ese magnetismo frágil–poderoso que puede volverla inolvidable.
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La dirección vuelve a manos de Francis Lawrence, quien desde Catching Fire se ha convertido en el guardián visual de la franquicia. Con un estreno programado para noviembre de 2026, y un presupuesto que supera los 150 millones de dólares, esta película apunta a convertirse en el proyecto más ambicioso de la saga desde Mockingjay.
Mientras esperamos los otros dos volúmenes de la quinta temporada de Stranger Things, donde Hawke retoma su papel como Robin, este salto a Panem confirma algo: la actriz está construyendo una carrera que no conoce zonas de confort. Y si algo sabemos de ella es que, cuando pisa un universo nuevo, no llega a jugar: llega a ganar.