
En la historia del cine, hay interpretaciones que trascienden la pantalla y se convierten en referencias culturales. Este es el caso de Vincent Vega, el personaje interpretado por John Travolta en Pulp Fiction (1994), cuya actuación no solo consolidó el regreso del actor a la cima de Hollywood, sino que también se convirtió en un símbolo del cine de Quentin Tarantino. Sin embargo, la clave para lograr una actuación tan convincente vino de un consejo inesperado: emborracharse con tequila y sumergirse en una piscina de agua caliente.
En una entrevista con BUILD Series, Travolta recordó cómo Tarantino le organizó una reunión con un exadicto conocido como Chippy para entender mejor el comportamiento de una persona bajo los efectos de la heroína. "Tomé muchas notas sobre cómo se comportaban cuando estaban en lo mejor y cuando estaban en lo peor, y todas las diferencias entre los dos estados", explicó el actor. Sin embargo, había un problema: ¿cómo interpretar esa sensación sin haber experimentado el consumo de la droga?

Fue entonces cuando Chippy le dio un consejo inesperado. "Me dijo que, si realmente lo necesitaba, me pusiera a beber tequila y me tumbara en una piscina de agua tibia. Me aseguró que esa sensación se acercaría a lo que se siente con la heroína", recordó Travolta. Siguiendo este inusual método, el actor aplicó la experiencia a las notas que había tomado, logrando dar vida a un personaje cuya forma de moverse y hablar transmitía con precisión el estado de un adicto.
El resultado fue una interpretación que dejó impactados a Tarantino y al equipo de producción. "Recuerdo que Quentin dijo que no sabía qué estaba haciendo, que caminaba lento, me arrastraba, hablaba despacio... Pero esa fue mi interpretación del arco de un adicto", reveló Travolta.

A tres décadas del estreno de Pulp Fiction, la actuación de John Travolta sigue siendo una de las más recordadas de su carrera. No solo revitalizó su estatus en la industria, sino que también dejó escenas icónicas que han sido homenajeadas y convertidas en memes, como el famoso 'Confused Travolta'.
El cine está lleno de anécdotas sobre métodos de actuación poco convencionales, pero pocos pueden decir que lograron una interpretación magistral gracias a una borrachera en una piscina. Lo cierto es que la historia de Vincent Vega es un recordatorio de cómo la dedicación y un enfoque poco ortodoxo pueden generar resultados inolvidables en la gran pantalla.