
Las nominaciones a los premios Oscar 2025 han traído sorpresas gratas y desagradables para el público a nivel internacional. Sin duda, una de las curiosidades para los expertos fue la ausencia de Cónclave en muchas categorías en las que se consideraba obvia su nombre entre las opciones tales como Mejor director o Mejor actor de reparto.
Esta última incluye entre los candidatos a Yura Borisov (Anora), Kieran Culkin (A real pain), Edward Norton (A Complete Unknown), Guy Pearce (El brutalista) y Jeremy Strong (El aprendiz). No en tanto, la crítica llegó a considerar que Stanley Tucci merecía más su consideración.
El intérprete se puso en la piel del cardenal Bellini, quien busca el papado a como dé lugar aunque al comienzo hace creer a todos que no tiene ningún interés en subir al poder. Gran parte del desarrollo de la trama, mueve sus influencias con el cardenal Lawrence (Ralph Fiennes). Una conversación entre ambos personajes tuvo gran impacto y es tratada como una de las mejores escenas del año, pero no fue suficiente para la Academia.

Lo curioso es que Tucci ha mostrado una gran evolución en su carrera como actor, pues desde hace algunos años se ha destacado en importantes dramas. No en tanto, hasta hace una década era una de las lumbreras de la comedia romántica.
Es más, muchos lo recuerdan principalmente por su rol como Nigel, el asistente de taller de Miranda, en El diablo viste a la moda. Su personaje despertó odios y amores en aquel entonces. Acto seguido, estuvo en la saga de Los juegos del hambre como César Flickerman, otro papel bastante divertido.
¿De qué se trata 'Cónclave'?
"Sigue muy de cerca uno de los rituales más secretos y antiguos del mundo: la elección del Papa. Tras la inesperada muerte del Sumo Pontífice, el cardenal Lawrence es designado como responsable de dirigir el cónclave", comienza diciendo la sinopsis oficial.

Luego, "en medio de una atmósfera cargada de tensión y secretismo, Lawrence debe garantizar que el proceso se lleve a cabo conforme a la tradición y las normas de la Iglesia. Cuando los líderes más poderosos de la Iglesia Católica se reúnen en los salones del Vaticano, Lawrence se ve atrapado dentro de una gran conspiración".