Cuando se anunció el lanzamiento de 'Terminator Zero', el nuevo anime de Netflix, la crítica recibió la noticia con escepticismo. La franquicia Terminator, que ha sido un ícono de la ciencia ficción desde su debut en los años 80, no ha logrado replicar el éxito de sus primeras entregas. Después de décadas de secuelas decepcionantes y reinicios fallidos, parecía que la saga había perdido su rumbo. Sin embargo, contra todo pronóstico, este anime ha logrado lo que parecía imposible: está cautivando tanto a nuevos espectadores como a fanáticos de antaño.
El proyecto de 'Terminator Zero' tenía una propuesta ambiciosa. Bajo la dirección del renombrado estudio japonés Production I.G., conocido por éxitos del género como 'Ghost in the Shell' y 'Psycho-Pass', la serie prometía llevar la historia a un escenario completamente nuevo, lejos de los protagonistas tradicionales de la saga, Sarah y John Connor. En su lugar, la narrativa se traslada a Japón y sigue la vida del científico Malcolm Lee, cuya creación, una inteligencia artificial llamada Kokoro, podría cambiar el futuro de la humanidad. Este cambio radical de enfoque y contexto ha sido, sin duda, uno de los grandes aciertos del anime.
La premisa se desarrolla en 1997, el año en que el Día del Juicio Final desata el caos en el mundo, con Skynet lanzando un ataque nuclear. La trama mezcla acción, dilemas filosóficos y una impresionante animación que ha dejado boquiabiertos a los espectadores. Dirigida por Masashi Kudo, la serie brilla por su estilo visual inquietante, especialmente en las escenas donde Malcolm interactúa con Kokoro, una inteligencia artificial representada de forma fantasmagórica que debate con su creador sobre el destino de la humanidad. Estos momentos han sido clave para capturar la esencia de la saga original, que siempre ha tratado de ir más allá de los efectos especiales para reflexionar sobre el futuro y la tecnología.
A pesar de las dudas iniciales, la serie ha sido recibida con gran entusiasmo. En solo pocos días desde su estreno, 'Terminator Zero' ha arrasado en Netflix, escalando posiciones en las listas de lo más visto en varios países. Parte de este éxito se debe a que ha sabido recuperar el espíritu de las dos primeras películas, ofreciendo una narrativa tensa y cargada de acción que ha faltado en las entregas anteriores de la franquicia.
No obstante, no todo ha sido perfecto en esta nueva entrega. A medida que avanza la trama, algunos críticos han señalado que la serie tiende a desviarse en subtramas familiares que ralentizan el ritmo de la historia. Los momentos de introspección y drama familiar, aunque bien intencionados, a veces resultan desconectados de la acción central. Este es, quizá, uno de los pocos puntos débiles de la serie, que en ocasiones parece olvidar que su mayor fortaleza reside en las intensas escenas de lucha y en la eterna batalla entre humanos y máquinas.
A pesar de estos inconvenientes, 'Terminator Zero' ha demostrado ser lo mejor que le ha pasado a la franquicia en mucho tiempo. Después de años de secuelas mediocres como 'Terminator 3' o 'Terminator Genisys', este anime ha logrado, al menos en parte, capturar la esencia de lo que hizo grande a la saga en sus comienzos.