Rechazar papeles es una práctica común entre las estrellas de Hollywood. Algunos de esos rechazos son motivo de alivio, mientras que otros se convierten en una espina persistente. Russell Crowe, el aclamado actor australiano, no es la excepción en este tipo de situaciones. En una entrevista con el Daily Mail, Crowe confesó el único papel que lamenta haber dejado pasar: el de Johnny Cash en la película 'Johnny & June' (2005).
El actor explicó que rechazar el papel de Johnny Cash fue una decisión motivada por una especie de moralidad interna. "Era como, '¡este es el trabajo de mis sueños!'. Desde niño tocaba y cantaba las canciones de Johnny Cash, pero sentí que en ese momento estaría recibiendo algo que no merecía", confesó el actor. La estrella de 'Gladiador' destacó que temía estar aprovechándose de la leyenda de Johnny Cash para obtener reconocimiento y premios, como las nominaciones al Grammy, lo cual le parecía incorrecto.
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La película 'Johnny & June', dirigida por James Mangold, finalmente fue protagonizada por Joaquin Phoenix, compañero de reparto de Crowe en 'Gladiador'. Phoenix recibió una nominación al Oscar por su interpretación de Cash, aunque el premio fue para Philip Seymour Hoffman por su papel en 'Capote'. Crowe recordó el impacto que le causó ver la película terminada. "Desde las primeras notas, cuando la cámara recorría la prisión, sentí como puñaladas en el corazón. No solo quería hacer la película, sino que era exactamente el tipo de filme que deseaba hacer", expresó con nostalgia.
Mientras Joaquin Phoenix brillaba en 'Johnny & June', Russell Crowe estrenaba 'Cinderella Man', dirigida por Ron Howard. Aunque la película tuvo una recepción favorable, el actor no pudo evitar sentir el peso de su decisión al ver la magistral interpretación de Phoenix.
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La reflexión de Crowe sobre este rechazo ofrece una mirada fascinante a las complejas decisiones que los actores deben tomar en su carrera. A veces, estas decisiones están influenciadas por consideraciones personales y éticas, que pueden llevar a oportunidades perdidas y a arrepentimientos duraderos.