La serie más costosa de Prime Video está lista para romper una tendencia que domina la fantasía desde hace 22 años
Santiago Díaz Benavides
Casi nadie conoce mi primer nombre, pero todos saben que tengo un homónimo español que escribe thriller. Me obsesionan las películas sobre el fin del mundo y tengo una particular debilidad por el cine de M. Night Shyamalan.

Ni el presupuesto gigante ni la nostalgia han logrado unir a crítica y audiencia, pero esta superproducción aún tiene tres temporadas para cambiar la historia.

Prime Video

Desde su estreno, The Lord of the Rings: The Rings of Power ha cargado un peso que ninguna otra serie de fantasía ha tenido que soportar: demostrar que es posible reconciliar a crítica y audiencia en un universo que lleva 22 años dividido. No es un capricho del mercado, es una herida abierta que dejó El retorno del rey —la última vez que todos, absolutamente todos, sintieron que estaban frente a una obra perfecta. Desde entonces, ninguna adaptación de Tolkien ha logrado repetir ese consenso. Y ahora, la serie más costosa en la historia de Prime Video intenta ser la primera en romper la maldición.

Con un presupuesto que supera los 1.000 millones de dólares invertidos hasta hoy, Amazon construyó Rings of Power como un coloso audiovisual: paisajes imponentes, criaturas emergidas del fuego y un vestuario que respira artesanía. Sin embargo, la belleza nunca ha sido el problema. El verdadero desafío se esconde en otra métrica: la distancia entre crítica y público. Mientras los expertos han mantenido una recepción sólida —84% en Rotten Tomatoes para ambas temporadas—, la audiencia ha respondido con suspicacia: primero un demoledor 38%, luego un 59% que apenas suaviza la curva.

Prime Video

Este desbalance no es nuevo. Tras la trilogía original de Peter Jackson, la fantasía tolkieniana ha sufrido una suerte de inestabilidad emocional. La trilogía de El Hobbit amplió un cuento breve hasta convertirlo en tres películas que nunca unieron a nadie. Luego llegó The War of the Rohirrim, que fascinó a gran parte del público general pero dejó inconformes a los críticos. La división se volvió costumbre. Un síntoma del tiempo: las expectativas crecieron, los seguidores cambiaron, y la vara quedó a una altura imposible.

Prime Video

Lo que Rings of Power tiene a su favor es tiempo —y ambición—. Prime Video ya confirmó cinco temporadas en total. Eso significa tres oportunidades más para enderezar un barco que navega entre el prestigio visual y la duda narrativa. Si la tercera temporada logra acortar la distancia entre el 84% de la crítica y el 59% del público, Amazon podría marcar un hito: la primera producción en dos décadas capaz de unir a todos bajo una misma bandera en la Tierra Media.

Pero incluso si la misión falla, la franquicia no está sola. Nuevas producciones avanzan en paralelo, tal vez listas para asumir el testigo. Peter Jackson vuelve al tablero como productor en The Hunt for Gollum, dirigida y protagonizada por Andy Serkis, uno de los intérpretes más queridos del universo Tolkien. Además, New Line Cinema prepara varias películas nuevas, aún sin detalles públicos, que buscan revitalizar el linaje épico de la saga y curar las fracturas que dejó el pasado reciente.

Prime Video

En última instancia, lo que está en juego no es solo el prestigio de Prime Video. Es el futuro emocional de un fandom que lleva más de veinte años intentando recuperar la experiencia colectiva de maravilla que produjo El retorno del rey. El reto es mayúsculo, pero también seductor: reescribir la épica, reconstruir la confianza, encender de nuevo ese fuego que parecía extinguido.

La Tierra Media vuelve a moverse. Y, con ella, la posibilidad de que la fantasía —por fin— deje de estar dividida.

facebook Tweet
Noticias relacionadas