Pocas producciones sobreviven a los contratiempos de un casting fallido. Eso fue lo que vivió Zach Cregger durante la preparación de Weapons, su más reciente película, que ya se perfila como uno de los fenómenos del año. El director, conocido por su sorpresivo éxito Barbarian (2022), se enfrentó a un escenario complejo: Pedro Pascal y varias de las estrellas inicialmente confirmadas tuvieron que abandonar el proyecto debido a la huelga de guionistas y problemas de agenda. Esto obligó a rehacer casi todo el reparto.
En ese panorama incierto, un solo nombre del elenco original decidió mantenerse firme: Austin Abrams. El joven actor, conocido por papeles en series como Euphoria y Dash & Lily, se aferró al proyecto cuando la mayoría de sus colegas debieron dar un paso al costado. En palabras de Cregger, “él aguantó conmigo, ese es mi tipo de actor”.
Getty Images
Abrams interpreta a James, un hombre sin hogar que lucha contra la adicción, un personaje complejo que, según confesó el propio actor, lo conquistó desde el primer momento. Pero su decisión de no abandonar Weapons no fue únicamente por el guion. En entrevista con Entertainment Weekly, reveló que todo se remonta a cuando vio Barbarian. “La vi con un amigo y recuerdo que, en la escena en la que aparece Justin Long en el auto, pensé: amo a la persona que hizo esta película”, recordó Abrams.
Ese entusiasmo lo llevó a buscar a Cregger y, una vez confirmado que el director estaba preparando un nuevo proyecto, supo que no quería perder la oportunidad. “Amaba el papel y no quería soltarlo. Sólo quería hacerlo”, explicó.
Screen Rant
El tiempo le dio la razón. Weapons, protagonizada ahora por Julia Garner y Josh Brolin, no solo ha recibido excelentes críticas, sino que también superó con creces las expectativas en taquilla: 70 millones de dólares en su primer fin de semana, más del doble de su presupuesto de producción.
La fidelidad de Abrams no solo fue un gesto de compromiso, sino también una jugada estratégica para su carrera. En una industria donde muchos actores priorizan la estabilidad de sus agendas o el brillo de grandes franquicias, él apostó por la visión de un director en ascenso. Y hoy, con Weapons consolidándose como un éxito rotundo, esa decisión parece haber sido la más acertada de todas.