Internet no descansa cuando se trata de hilar teorías descabelladas —y a veces brillantes— sobre los universos cinematográficos más queridos. En esta ocasión, los fans de Pixar han revivido una antigua especulación con renovado entusiasmo: Jack-Jack, el bebé de Los Increíbles 2, podría haber cruzado accidentalmente al universo de Monsters, Inc. durante uno de sus múltiples estallidos de poder. Sí, el mismo universo donde los gritos infantiles son fuente de energía y donde una niña llamada Boo causó más de un problema en Monstruópolis.
Todo comenzó con un fragmento poco comentado de Monsters, Inc. (2001). En medio del caos provocado por la presencia de una niña humana en el mundo de los monstruos, un personaje secundario —un monstruo con acento peculiar— es entrevistado por las autoridades de la CDA. Su testimonio es desconcertante: “Un niño voló sobre mí y destrozó un auto con su rayo láser”. En su momento, la frase pasó como una exageración humorística. Pero desde que Los Increíbles 2 (2018) reveló el verdadero alcance de los poderes de Jack-Jack, la línea ha cobrado un nuevo sentido.
Captura de pantalla
El bebé Parr no solo dispara rayos láser por los ojos; también puede flotar, clonarse, volverse fuego, atravesar paredes… y, crucialmente, abrir portales a otras dimensiones. En una de las escenas más memorables de la secuela, Jack-Jack desaparece completamente de la realidad y solo regresa cuando su padre le ofrece una galleta. ¿Dónde estuvo durante ese tiempo? La teoría sugiere que pudo haber terminado, sin querer, en el mundo de los monstruos.
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Aunque Pixar nunca ha confirmado esta conexión, la idea se alinea perfectamente con la llamada “Teoría del Universo Pixar”, que plantea que todas las películas del estudio transcurren en la misma línea temporal, desde la prehistoria (Brave) hasta un futuro lejano dominado por la inteligencia artificial (Wall-E).
De ser cierta, la teoría convertiría a Jack-Jack en el primer humano con superpoderes conocido por los monstruos, mucho antes de la llegada de Boo. Incluso hay quienes imaginan que ambos podrían cruzarse en una futura entrega. Por ahora, es solo una hipótesis, pero una que —como muchas de Pixar— está cargada de imaginación, nostalgia y más de un guiño para los espectadores atentos.