
Muchos la recuerdan como la adorable e irónica hija de la pareja más entrañable de Modern Family. Lily Tucker-Pritchett, interpretada por Aubrey Anderson-Emmons desde los cuatro años, fue durante casi una década parte fundamental del carisma que definió la exitosa comedia de ABC. Sin embargo, lo que pocos imaginan es el sorprendente giro que ha dado la vida de esta joven, quien ahora, a los 18 años, luce irreconocible y se abre paso en nuevos caminos lejos de la imagen infantil que todos recuerdan.
Aubrey fue elegida para interpretar a Lily luego de que las gemelas Ella y Jaden Hiller, quienes dieron vida al personaje en sus primeros años, dejaran la serie porque, según su madre, no disfrutaban de la experiencia. Así, Anderson-Emmons se convirtió en uno de los rostros más jóvenes y populares del reparto desde 2011 hasta el final del show en 2020. Pero el reconocimiento masivo también vino acompañado de retos personales.

En un video publicado en TikTok, la actriz reflexionó sobre su infancia frente a cámaras y explicó que, aunque su paso por la televisión fue positivo, no todo fue fácil. “Con cuatro años no sabes en qué te estás metiendo”, dijo con franqueza. Aclaró también que nunca fue obligada a actuar ni sufrió abusos en el set, pero admitió que crecer bajo la mirada pública le afectó emocionalmente. “La gente opinaba sobre mis decisiones interpretativas. Me hicieron sentir que era mala actriz. Fue duro”.

Ese impacto emocional se tradujo en una pausa necesaria. Alejada temporalmente de la actuación, encontró en el teatro escolar un refugio para redescubrir su pasión por las artes escénicas. Hoy, se siente más segura y ha retomado el camino de las audiciones, esta vez con una visión más madura de lo que significa ser actriz.
Pero no todo en su vida gira en torno a la pantalla. Bajo el nombre artístico de Frances Anderson, Aubrey ha comenzado también una carrera musical. Su primera canción, Telephones And Traffic, ya está disponible en plataformas, marcando así el inicio de una nueva etapa artística que busca dejar atrás el personaje de Lily sin renegar de él. “Estoy agradecida por todo lo que Modern Family me dio. Es hora de pasar a otro capítulo de mi vida”, concluyó la joven, quien parece decidida a que su historia apenas esté comenzando.