En medio del catálogo de Netflix Colombia, donde los dramas juveniles y las series de suspenso suelen competir por la atención del público, una nueva producción ha emergido con fuerza y sin demasiado ruido previo: Apuesta (título original en inglés: Bet). Aunque muchos ya la tienen en sus listas o la han devorado en maratones, pocos saben que esta historia de intriga, juegos extremos y jerarquías escolares proviene de un popular manga japonés titulado Kakegurui, escrito por Homura Kawamoto e ilustrado por Tōru Naomura.
Apuesta es una serie canadiense de 10 episodios, creada por Simon Barry —conocido por su trabajo en Warrior Nun—, que adapta libremente el universo de Kakegurui, manteniendo su esencia pero trasladándola a un entorno occidental: la exclusiva escuela St. Dominic, donde los alumnos no solo compiten por calificaciones, sino por poder... a través de apuestas.
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La historia sigue a Yumeko Kawamoto (interpretada por Miku Martineau), una joven alumna de intercambio que llega con un talento excepcional para los juegos de azar. Lo que parece una simple competencia entre adolescentes se transforma rápidamente en una trama oscura y peligrosa cuando descubrimos que las apuestas en St. Dominic no son solo por prestigio: pueden costarte la dignidad, la libertad... e incluso la vida.
Yumeko, impulsada por una motivación secreta, va desafiando uno a uno a los miembros del poderoso Consejo Estudiantil, liderado por la implacable Kira (Clara Alexandrova). A cada paso, se gana aliados como Ryan (Ayo Solanke), un estudiante marginado que se convierte en su confidente y admirador, y enfrenta a rivales como Mary (Eve Edwards) y Suki (Ryan Sutherland), que no dudan en utilizar trampas o manipulación para mantenerse en la cima.
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Lo que distingue a Apuesta de otras series juveniles es su combinación de dramatismo, estética visual estilizada y una narrativa que mezcla la emoción de los juegos con una búsqueda personal de justicia. Yumeko no solo quiere ascender en el sistema; su verdadero objetivo es desmantelarlo desde adentro. A lo largo de la temporada, se revela que sus padres fueron asesinados por miembros de un grupo secreto vinculado al pasado oscuro de la escuela. La joven, entrenada desde niña, ha regresado para vengarse.
Con una duración de entre 25 y 30 minutos por episodio, Apuesta ha sido calificada como “adictiva” y “llena de giros”, aunque algunos críticos han cuestionado su superficialidad y su repetición de fórmulas. Sin embargo, su ritmo ágil, sus enfrentamientos estratégicos y el carisma de su protagonista la han convertido en una de las series más vistas en Netflix Colombia, especialmente entre los fanáticos del anime y los thrillers adolescentes.
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La adaptación se toma licencias con respecto al manga original, trasladando la acción a un contexto más occidental y agregando elementos nuevos como conspiraciones familiares y amenazas internacionales, pero mantiene el espíritu de Kakegurui: una crítica feroz al poder, la codicia y las instituciones que premian a los más despiadados.
Lo que comenzó como una historia de apuestas escolares se transforma, episodio tras episodio, en una cruzada por la verdad, la memoria y la redención. Si todavía no has visto Apuesta, es momento de sumergirte en este mundo donde cada movimiento es una jugada, y cada jugada puede costarte todo.