
En la icónica secuela dirigida por Robert Zemeckis, Marty McFly (Michael J. Fox) viaja al futuro y se encuentra en un café retrofuturista. Allí, un niño que intenta jugar con una máquina de arcade aparece en escena. Su personaje, con una gorra verde y acompañado de un amigo, queda sorprendido al ver a McFly usar la antigua tecnología. Esta escena, aunque breve, ha terminado convirtiéndose en una de las más memorables de la franquicia por un detalle en particular: marcó el inicio de la carrera de uno de los actores más populares de Holywood durante los últimos tiempos y una de las estrellas más reconocidas del cine. ¿Sabes de quién hablamos?

Esa mirada es inconfundible. Elijah Wood, el inolvidable Frodo de El Señor de los Anillos, debutó en la gran pantalla en 1989, cuando apenas tenía ocho años, de la mano de Robert Zemeckis. A partir de entonces, comenzó a ganar papeles más relevantes en la industria del cine. En 1990, participó en la película Avalon, de Barry Levinson, y más tarde protagonizó filmes como Radio Flyer (1992) y Las aventuras de Huckleberry Finn (1993), consolidándose como una de las promesas infantiles de Hollywood.
Sin embargo, fue en 2001 cuando su carrera despegó definitivamente con El Señor de los Anillos: La Comunidad del Anillo. La trilogía de Peter Jackson, basada en la obra de J.R.R. Tolkien, se convirtió en un hito cinematográfico, y Wood en un rostro inconfundible de la saga.

Lejos de encasillarse, Elijah Wood ha explorado diversos géneros en su carrera. Ha participado en thrillers como Sin City (2005), en cine de animación con Happy Feet (2006) y en el terror con filmes como Maniac (2012). Más recientemente, ha seguido participando en proyectos independientes y de género, como la película de horror The Monkey, dirigida por Osgood Perkins y basada en un relato de Stephen King.
A 36 años de su debut en la saga de Volver al futuro, Elijah Wood sigue siendo un actor versátil que se reinventa constantemente. Su trayectoria demuestra que, incluso los papeles más pequeños, pueden ser el punto de partida para una carrera extraordinaria en Hollywood.