Con el estreno de 'Cien años de soledad' en Netflix, el universo de Macondo cobra vida en una adaptación que busca capturar la esencia del realismo mágico de Gabriel García Márquez. En una entrevista con Sensacine Latam, Marco González (José Arcadio Buendía), Susana Morales (Úrsula Iguarán) y Viña Machado (Pilar Ternera) reflexionaron sobre el proceso creativo detrás de sus personajes y la conexión entre la soledad, la vida cotidiana y la magia que rodea esta historia.
El tono que da vida a Macondo
Uno de los mayores retos que enfrentó el elenco fue encontrar el tono adecuado para transmitir la esencia de los personajes. Viña Machado destacó cómo su interpretación de Pilar Ternera requirió una pausa reflexiva, lejos de su naturaleza enérgica. "El tono surgió de los detalles: la ambientación, el vestuario y el tiempo que nos dimos en cada escena", explicó, subrayando que este enfoque pausado permitió construir un Macondo que se siente vivo y auténtico.
Susana Morales agregó que este tono se fue desarrollando de forma conjunta entre los actores, quienes maduraron junto con sus personajes durante el rodaje. "Nuestros personajes mutaron a medida que nosotros también lo hacíamos", mencionó, destacando cómo los conflictos en pantalla ayudaron a crear dinámicas profundas y verosímiles.
El realismo mágico como espejo de la vida cotidiana
La serie, al igual que el libro, invita al espectador a reflexionar sobre la realidad mágica que habita en lo cotidiano. Para Marco González (José Arcadio Buendía), así como la novela intentaba ser un espejo, la producción es "un ejercicio de observación y sintonización con lo sutil. La magia está ahí si uno sabe verla", explicó.
Durante la entrevista, los tres actores no dudaron en reflexionar alrededor de los pequeños detalles de su experiencia para responder. Tanto Viña Machado como Susana Morales y Marco González son conscientes de que encarnar a estos personajes requería de una mirada distinta, mucho más atenta de la realidad.
¿Abrazarías la soledad durante 100 años?
La conversación también giró en torno a una de las preguntas centrales de la historia: la soledad como destino y elección. Para Marco González, la soledad representa un espacio de libertad, un lugar donde el diálogo interno se fortalece y se construye identidad. Sin embargo, Viña Machado señaló que, aunque todos enfrentamos la soledad de distintas maneras, es inevitable y, en ocasiones, incluso bienvenida.
Para Susana Morales, interpretar a Úrsula Iguarán le permitió explorar los matices de la soledad. "En la profundidad de esa soledad hay un diálogo interno que se fortalece", comentó, conectando su interpretación con una idea universal: la soledad como parte inherente de la existencia.
Esta adaptación de Netflix no solo busca dar vida al mundo de Macondo, sino también invitar a los espectadores a reflexionar sobre la conexión entre lo mágico y lo humano. Al final, 'Cien años de soledad' sigue siendo un recordatorio de que en lo más cotidiano puede residir lo extraordinario.