Nicole Kidman ya tiene 57 años y continúa siendo una de las actrices más importantes de Hollywood. Su gran talento, así como su carisma inigualable o su belleza despampanante, la colocan en el centro de los reflectores desde que comenzó su carrera, por allá en los 90.
En su filmografía hay muchos proyectos que marcaron el séptimo arte para siempre tales como Días de trueno, Moulin Rouge, Los otros, Rabbit Hole o Las horas, habiendo ganado un Premio Oscar por esta última en 2003.
Pero el impacto de sus cintas no es lo único impresionante en su recorrido, sino también la calidad de actores y directores con los que ha trabajado. Por ejemplo, ha estado en sets liderados por genios del calibre de Stanley Kubrick, Baz Luhrmann o Yorgos Lanthimos.
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Y aunque los nombres puedan sorprender a cualquiera, la intérprete sigue firme en su intención de poder hacer un filme con uno de los cineastas más destacados de todos los tiempos, es decir, Martin Scorsese.
Es bien sabido que el realizador ya únicamente trabaja con aquellos a quienes conoce muy bien, considerando algunos ejemplos como el de Leonardo DiCaprio, Robert De Niro o Daniel Day-Lewis.
Sin embargo, por algún motivo, sus tramas nunca se han centrado en mujeres y de hecho, salvo Los asesinos de la luna, nunca ha tenido a una actriz realmente destacada en sus largometrajes, cosa que Kidman ha considerado.
“Y siempre he dicho que quiero trabajar con Martin Scorsese si hace una película con mujeres. Me encantaría trabajar con Kathryn Bigelow. Me encantaría trabajar con Spike Jonze. Me encantaría trabajar con la PTA [ Paul Thomas Anderson]. Siempre quise trabajar con Michael Haneke. Y hay una nueva ola de directores emergentes... Hay muchos, y siempre estoy abierto a descubrir gente nueva”, expresó en una entrevista para Vanity Fair.
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¿Martin Scorsese coloca a un lado a sus personajes femeninos?
Al respecto de la cuestión de tener muy pocos personajes femeninos relevantes en sus obras, Scorsese dijo a Sight & Sound que “insistí en volver atrás y ponerle capas a Peggy para hacerla más observadora. Ella no es una observadora, pero es parte del grupo, parte de la historia. Conoce a Frank. Ella no necesita decir una palabra. Cuando ella lo mira y él está sentado comiendo cereal, escuchando las noticias sobre la muerte de Joey Gallo, la expresión de su rostro lo dice todo. Anna Paquin, que está maravillosa en la película, sólo tiene una línea de diálogo. Pero ella lo sabe todo por la apariencia, y ella es con quien Frank quiere estar, ella es con quien él quiere amarlo, pero Peggy se niega a hablar con él después de enterarse de sus crímenes", refiriéndose al papel de Anna Pacquin en El irlandés.