Clint Eastwood es sinónimo de cine western. Desde sus inicios en la década de los 60, especialmente con su papel de 'El hombre sin nombre' bajo la dirección de Sergio Leone, se consolidó como una leyenda del género. Sin embargo, su carrera abarca mucho más que el oeste americano. En 1978, sorprendió al mundo del cine al protagonizar una comedia de acción junto a un inesperado compañero: un orangután.
La película en cuestión es 'Every Which Way but Loose' (Pendenciero rebelde). Dirigida por James Fargo, el filme cuenta la historia de Philo Beddoe, interpretado por Eastwood, un hombre que se embarca en un viaje por el oeste de Estados Unidos en busca de un amor perdido. Acompañado por su hermano Orville y su mascota Clyde, un orangután, Beddoe debe enfrentar a una pandilla de motociclistas y policías en busca de venganza.
A pesar de las críticas y las advertencias de su círculo cercano, Eastwood decidió seguir adelante con el proyecto. "Todos me rogaron que no hiciera esta película", recordó el actor y director. "Yo había hecho diversas películas de acción y aventura, pero me dijeron 'Tú no eres así'". Sin embargo, su decisión demostró ser acertada. Con un presupuesto modesto de 5 millones de dólares, la película recaudó más de 104 millones en taquilla, convirtiéndose en un éxito rotundo.
El andar de 'Pendenciero rebelde' no solo añadió una dimensión inesperada a la carrera de Eastwood, sino que también reafirmó su habilidad para elegir proyectos que resuenan en la audiencia, incluso cuando nadie más lo creía posible. La película, además, dejó una marca cultural duradera, siendo recordada por momentos icónicos como el famoso meme del orangután haciendo una seña con el dedo medio.
Eastwood, quien también ha tenido una carrera destacada como director, continúa siendo una figura influyente en la industria del cine. Su historia con 'Pendenciero rebelde' demuestra que a veces, seguir el instinto propio contra viento y marea puede llevar a los mayores éxitos, incluso cuando todos alrededor aconsejan lo contrario.