‘Mis dos voces’, documental colombo-canadiense que narra la experiencia migratoria de tres mujeres llegó a las salas
Julieth Castaño
Julieth Castaño
-Redactora
Soy un mix entre Merlina Addams y Harley Quinn. Vivo en el número 7 de calle Melancolía. Quería ser actriz de cine, pero terminé escribiendo de cine

La producción, dirigida por la bogotana Lina Rodríguez, se puede ver en la Cinemateca de Bogotá. Conoce los lugares en los que se proyectará en el resto del país.

Lina Rodríguez, directora de 'Mis dos voces’

Dentro de lo nuevo que hay en la cartelera colombiana destaca el documental 'Mis dos voces', que tuvo a la bogotana Lina Rodríguez al frente de la dirección. La producción colombo-canadiense cuenta con la participación protagónica de tres mujeres: por un lado están las colombianas Marinela Piedrahita y Claudia Montoya, y por el otro la mexicana Ana Kostic. Las tres narran su experiencia migratoria a Canadá con todos los altibajos que esto conlleva: dejar una vida atrás, el país de origen, familia y amigos, adaptarse a una nueva cultura e idioma y buscar un sitio que vuelva a sentirse como propio.

En su documental, Rodríguez plantea una forma diferente de narración para lograr una conexión con la audiencia que no estuviera basada solamente en la imagen de sus protagonistas. En su caso, quiso conectar principalmente con las voces de cada una.

"Decidí no mostrar sus rostros al principio, pues siento que a veces creemos que al ver a alguien estamos más cerca de saber quién es. Nuestras identidades son mucho más complejas que lo que muestra nuestra apariencia. Me interesaba complicar esta idea de ‘conocimiento’ e invitar a los espectadores a escucharlas, a observar los gestos y texturas de sus vidas cotidianas. Quería tejer otro tipo de relación con la complejidad de sus vidas, de sus experiencias y de sus historias”, comentó la directora a través de un comunicado.

Como inmigrante, muchas veces puede persistir la sensación de no sentirse ni de aquí ni de allá, una especie de desorientación que la cineasta también quiso plasmar en su documental desde los encuadres y el sonido para provocar un proceso de inmersión en el espectador, que también se sintiera desubicado.

La bogotana, además de dirigir, participó en la producción del documental junto con Brad Deane. La película fue proyectada en la sección del Forum en el marco del Festival Internacional de Cine de Berlín, desarrollado en febrero pasado. Este 27 de abril llegó a Colombia para estar disponible en las salas de la Cinemateca de Bogotá. En Medellín se puede ver en el Museo de Arte Moderno y Colombo Americano Medellín. Además de Cinema Fundadores en Manizales y la Cámara de Comercio de Pereira. Finalmente, se encuentra en el Museo La Tertulia en Cali.

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