Hay ficciones que no necesitan giros espectaculares ni efectos especiales para conquistar al público. El verano en que me enamoré (The Summer I Turned Pretty), disponible en Prime Video, es una de ellas. Basada en la trilogía homónima de la escritora Jenny Han, la serie se ha consolidado como un referente del romance adolescente contemporáneo, combinando ternura, nostalgia y el encanto de esos recuerdos que parecen detenidos en los veranos de juventud.
La trama sigue a Isabel "Belly" Conklin (interpretada por Lola Tung), una adolescente que cada año pasa las vacaciones junto a la familia Fisher en una casa de playa. Sin embargo, aquel verano deja de ser uno más: el tiempo y el crecimiento hacen que los vínculos cambien, y lo que antes parecía amistad se transforma en un sentimiento más complejo. Belly se encuentra en medio de Conrad (Christopher Briney) y Jeremiah (Gavin Casalegno), dos hermanos muy distintos entre sí, pero unidos por una relación fraternal y por el afecto hacia ella.
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Lo que podría reducirse a un triángulo amoroso se convierte en una exploración de lo que significa crecer, descubrir la identidad y afrontar los retos de las primeras decisiones importantes. La serie no solo habla de romances juveniles, también aborda la complicidad entre madres e hijos, la fuerza de la amistad y la importancia de los pequeños momentos que marcan para siempre.
Estrenada en junio de 2022, la primera temporada adapta el primer libro de Han y rápidamente se ganó la atención de una audiencia global. Su segunda entrega, lanzada en 2023, amplió el alcance emocional al incluir tramas relacionadas con la enfermedad y el duelo, sin perder el tono cálido y cercano que caracteriza a la narración. Prime Video ya confirmó una tercera temporada, inspirada en el desenlace de la trilogía literaria, lo que mantiene la expectativa de los seguidores que quieren saber cómo se resolverá la historia de Belly y los hermanos Fisher.
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Otro elemento que contribuye a su popularidad es la cuidada banda sonora. Con canciones de artistas como Taylor Swift, que acompañan momentos clave, la serie refuerza su capacidad de conectar con el público a través de la música, evocando emociones universales.
El verano en que me enamoré es, en esencia, una carta de amor a esa etapa en la que todo se siente por primera vez. Una producción que, sin pretensiones, logra recordar lo que significa vivir un verano que lo cambia todo.