Desde su debut, cuatro temporadas atrás, 'Emily in Paris' nos ha enamorado con su estilizada visión de París, y a los amantes del cine clásico, nos ha regalado sutiles y no tan sutiles guiños a una de las figuras más legendarias de Hollywood: Audrey Hepburn. Estos homenajes no solo son un deleite visual, sino que rinden tributo a la actriz a través de la moda, la elegancia y el encanto que caracterizaron sus películas.
Uno de los primeros momentos en los que encontramos esta conexión ocurrió en la primera temporada, episodio 6, cuando Emily Cooper (Lily Collins) asiste a una función de El lago de los cisnes en el Palais Garnier. Con un elegante vestido negro de hombros descubiertos y una actitud decidida, Emily ascendiendo las majestuosas escaleras del teatro recuerda de inmediato a Hepburn en la icónica escena de 'Funny Face' (1957), donde Jo Stockton (interpretada por Hepburn) desciende las escaleras del Louvre mientras es fotografiada por el personaje de Fred Astaire. Aunque los detalles del vestuario varían, la referencia es clara: la moda y la sofisticación de Hepburn están presentes.
Con el paso de las temporadas, las alusiones a Hepburn se vuelven más frecuentes y elaboradas. En la cuarta temporada, varios momentos continúan el tributo. Por ejemplo, en una imagen promocional, Emily luce un vestido rojo de satén acompañado de guantes largos mientras desciende la famosa Escalinata de la Plaza de España en Roma, un evidente homenaje a la secuencia de 'Funny Face', filmada originalmente en el Louvre. La serie aprovecha estos escenarios icónicos para conectar a sus personajes con el glamour de la vieja escuela del cine, en especial el de Hepburn.
Otro homenaje memorable aparece en un episodio en el que Emily, montada en una Vespa y con un pañuelo en el cuello, recrea una de las escenas más emblemáticas de 'Vacaciones en Roma' (1953), donde la princesa Ann (Hepburn) vive su escapada en la capital italiana. Estas referencias a la cultura cinematográfica clásica no solo muestran el buen gusto en la moda y el arte de los creadores de la serie, sino que también vinculan a Emily Cooper con el tipo de protagonista que Hepburn personificaba: mujeres independientes, seguras de sí mismas, pero siempre elegantes.
El vestuario es otro aspecto clave para este tributo. Marylin Fitoussi, diseñadora de vestuario de la serie, reveló en una entrevista que, para una de las escenas de la cuarta temporada, logró conseguir una réplica de los lentes de sol que Hepburn usó en 'Desayuno en Tiffany's' (1961). Según Fitoussi, cuando Lily Collins se probó los lentes, tanto ella como el equipo sintieron una profunda conexión con la mítica estrella de Hollywood.
No es casualidad que los creadores de 'Emily in Paris' recurran a Hepburn como inspiración recurrente. La actriz sigue siendo un símbolo de elegancia y sofisticación, atributos que la serie busca transmitir a través de su protagonista. Además, Hepburn es un ícono que ha trascendido generaciones, y muchos espectadores de la serie, especialmente los millennials, han crecido con su imagen en la cultura pop, ya sea en posters, cuadros o camisetas.
Así, 'Emily in Paris' no solo es una carta de amor a París, sino también a una de las figuras más queridas del cine. Cada temporada nos regala momentos que nos transportan al glamour del viejo Hollywood, recordándonos que, aunque los tiempos cambian, algunas estrellas, como Audrey Hepburn, nunca pasan de moda.