La película Super Mario Bros de 1993, dirigida por Rocky Morton y Annabel Jankel, es conocida por muchos como uno de los peores fracasos en la historia del cine. Aunque en aquel momento se esperaba que la adaptación de los famosos videojuegos de Nintendo fuera un gran éxito de taquilla, la película resultó ser un desastre tanto en términos de crítica como de audiencia.
Una de las principales razones por las que Super Mario Bros no funcionó fue porque los cineastas decidieron alejarse demasiado del material original. Los videojuegos de Mario son conocidos por su estilo de juego divertido y lleno de acción, pero la película decidió seguir una trama más oscura y compleja, con personajes inesperados como el Rey Koopa (interpretado por Dennis Hopper) que parecía más una parodia que una interpretación fiel del personaje del juego.
La película también presentó una versión diferente de la Princesa Peach, en lugar de ser una damisela en apuros, se convirtió en una guerrera de combate, lo que resultó extraño y poco familiar para los fanáticos del juego.
Otra razón importante por la que la película fracasó fue porque las actuaciones fueron poco inspiradas. A pesar de que los actores Bob Hoskins y John Leguizamo hicieron lo mejor que pudieron con sus roles como Mario y Luigi, el guion y la dirección no les dieron suficiente material para trabajar. Además, la química entre los dos protagonistas no fue lo suficientemente fuerte como para llevar la trama adelante.
Además, la película también tuvo problemas con los efectos especiales y la producción en general. Aunque contó con un presupuesto de más de $ 40 millones, los efectos especiales no estaban a la altura de las expectativas. Los decorados eran bastante limitados, y los efectos de animación eran bastante rudimentarios, lo que hacía que los personajes parecieran menos realistas. La película también tuvo varios cambios de guion y re-grabaciones que crearon inconsistencias y problemas en la trama.