Las historias reales que han ocurrido recientemente en Colombia han ayudado a que la ficción se inspire y tome ideas de ahí para series o películas. El caso actual es el que se ve con Secuestro del vuelo 601, que se basa en la intercepción ilegal de un avión ocurrida en 1973.
El hecho conmocionó al país en ese entonces, debido a que fue el rapto más largo en la historia de Latinoamérica de una aeronave. Por lo menos durante 55 horas, los pasajeros y la tripulación estuvieron a merced de dos antisociales que quitaron su paz. Aunque Netflix lo retrató con maestría, así se vieron los elementos del caso en la vida real.
1. El avión del vuelo 601
En la vida real, la nave interceptada por los dos futbolistas paraguayos/revolucionarios fue un HK-1274 de la Sociedad Aeronáutica de Medellín, mejor conocida como SAM. Este tenía una capacidad para aproximadamente 84 pasajeros e iba lleno completamente.
2. El capitán
El capitán de la nave fue el encargado de mantener la calma y los recursos hasta lograr convencer a los secuestradores. En la serie, es interpretado por Christian Tappan y para la ficción fue llamado Capitán Lucena.
3. La tripulación
Por lo menos tres azafatas tuvieron que lidiar con la preocupación de brindarle servicio a los pasajeros, mientras iban con la incertidumbre de si su vida estaba o no en riesgo. En el drama de Netflix, cobran un papel igual de importante. Mónica Lopera encarna a una de ellas llamada Edilma Pérez.
4. Los secuestradores
Los paraguayos Eusebio Borja y Francisco López Solano llegaron a Colombia con la ilusión de jugar fútbol profesional, pero sus sueños se truncaron por problemas ajenos a sí mismos.
Enojados con el sistema, decidieron buscar una oportunidad a las buenas o a las malas.
5. Los rehenes del vuelo 601
Encapuchados, amordazados y desorientados viajaron los pasajeros del vuelo 601. Sin saber en qué países había pasado el trayecto, fueron obligados a descender del avión en varias ocasiones hasta que por fin fueron liberados.