Shogun, la serie de Disney+ que nos transporta al Japón del siglo XVII continúa su dominio absoluto en la temporada de premios al conquistar el Globo de Oro a Mejor serie de drama, superando a competidores como The Day of the Jackal, The Diplomat y El juego del Calamar de Netflix. Este nuevo triunfo se suma a su impresionante colección de galardones, que incluye 18 premios Emmy entre las ceremonias Creative Arts y Primetime.
La producción de FX, que transporta a los espectadores al fascinante mundo del Japón feudal de hace más de 400 años ha demostrado ser mucho más que un simple éxito de audiencia. Con más de 9 millones de visualizaciones en sus primeros seis días de estreno a través de plataformas como Hulu, Disney+ y Star+, Shogun se ha convertido en el título más visto en la historia de FX en streaming.
La serie, que entreteje las historias del náufrago inglés John Blackthorne (Cosmo Jarvis) y el poderoso señor feudal Yoshii Toranaga (Hiroyuki Sanada), ha cautivado tanto a la crítica como al público con su meticulosa atención al detalle histórico y su profunda exploración de los choques culturales entre Oriente y Occidente.
A pesar del éxito y la demanda de los fans por más contenido, los co-creadores Justin Marks y Rachel Kondo han confirmado que la serie mantendrá su visión original como una temporada única. Esta decisión, aunque decepcionante para muchos seguidores, refleja el compromiso del equipo creativo con la integridad narrativa de la adaptación de la novela de James Clavell.
La victoria de Shogun en los Globos de Oro 2025 no solo consolida su lugar en la historia de la televisión, sino que también marca un momento significativo para la representación asiática en la industria del entretenimiento occidental. La serie ha sido elogiada por su autenticidad cultural y su elenco predominantemente japonés, estableciendo un nuevo estándar para las producciones internacionales.
Con este galardón, la serie refuerza su posición como uno de los fenómenos televisivos más importantes de la década, demostrando que las historias épicas, cuando se cuentan con respeto y precisión histórica, pueden resonar con audiencias globales y alcanzar los más altos niveles de popularidad sin comprometer el respeto.