Donald Glover, también conocido como Childish Gambino, no se detiene a la hora de demostrar su increíble talento creativo. Después de recibir múltiples galardones por la increíble serie Atlanta (2016-2022), acaba de estrenar Swarm, una perturbadora miniserie que gira en torno a una artista pop inspirada en Beyoncé. Es una extraña historia de crimen y suspenso que vale mucho la pena.
Junto a Glover, la serie es creada por Janine Nabers, también escritora de Atlanta, y cuenta con un elenco lleno de nombres relacionados con el mundo del entretenimiento. Entre ellos se encuentra Billie Eilish, quien debuta como actriz en un papel muy interesante y perturbador. Además, dentro del grupo de escritores está Malia Obama, hija de Barack Obama.
Sin duda, Swarm no es para todo el mundo, y sin ánimo de hacer spoilers, es importante que sepan que cada capítulo nos introduce en la mente de Dre, interpretada por la inmejorable Dominik Fishback, quien pasa de ser un personaje incómodo y extraño a una trastornada asesina.
A través del camino de sangre que va dejando Dre, la historia se presenta como una cruda sátira al mundo del fandom y de las redes sociales. Situaciones absurdas que no son muy ajenas a la realidad y que resumen a la perfección la contemporaneidad. Todo esto con el toque mágico y detallado de Glover.
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El diablo está en los detalles. Por ejemplo, la colorización de la serie nos hace sentir incómodos todo el tiempo, y sin necesidad de exceder las escenas sangrientas, las imágenes logran por algunos momentos producirnos repulsión.
Mentiría si dijera que la serie me produjo muchas sensaciones y no todas placenteras, pero estoy seguro de que estamos ante una de las grandes del año.