Cuando vemos a Brad Pitt, Will Smith o Viola Davis desfilar en las alfombras rojas, es fácil pensar que cada paso que dieron en su carrera los llenó de satisfacción. Sin embargo, Hollywood también está lleno de decisiones que, en retrospectiva, sus protagonistas preferirían borrar. Aquí repasamos a diez actores que, sin importar el éxito o la fama alcanzados, se arrepintieron de haber participado en ciertas películas.
Brad Pitt
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El chico de oro es un caso emblemático. Antes de ser el galán de Hollywood, participó en Cutting Class, una película de terror escolar que él mismo calificó como “horrible”. Tanto detesta el filme, que una leyenda urbana asegura que junto a Jennifer Aniston compró una copia en VHS solo para destruirla. Aunque él mismo desmintió esa anécdota, admitió sin reparos que, de poder hacerlo, eliminaría cada copia existente.
Will Smith
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El reconocido actor también carga con un peso cinematográfico: After Earth, dirigida por M. Night Shyamalan. Con su hijo Jaden Smith como coprotagonista y un presupuesto de 130 millones de dólares, el proyecto fue un desastre en taquilla. Para Will, el golpe fue doble: el fracaso afectó su relación profesional con su hijo y lo llevó a replantearse su trayectoria, alejándose del modelo de estrella invencible que había construido.
Viola Davis
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En la icónica actriz el arrepentimiento tuvo un matiz más doloroso. Aunque Historias cruzadas (Help) recibió elogios y premios, Davis lamentó que la película no abordara de manera auténtica la realidad del racismo sistémico. En una entrevista con Vanity Fair, confesó que su participación no representó a las mujeres negras como ellas merecían, llevándola a replantear los proyectos que aceptaría en el futuro.
Sir Alec Guinness
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A veces, el desencanto viene de los propios diálogos. Guinness, quien dio vida a Obi-Wan Kenobi en Star Wars: Episodio IV, detestaba tanto sus líneas como la adoración casi religiosa de los fans. Aunque su papel le trajo fama eterna, para él, ser parte del fenómeno galáctico fue más una penitencia que un honor.
Jennifer Lawrence
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La actriz tampoco guarda buenos recuerdos de Passengers. En una ocasión, confesó que no detectó los problemas del guion hasta que fue demasiado tarde. Aunque intentó defender el proyecto durante la promoción, más tarde reconoció que se sentía incómoda por cómo se contaba la historia.
Jessica Alba
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Alba, que en los 2000 era una de las grandes promesas de Hollywood, vivió una experiencia frustrante en Los 4 Fantásticos. No solo recibió críticas por su actuación, sino que además tuvo conflictos con el director, quien, según contó, llegó a pedirle que llorara de una forma “más bonita”, restándole autenticidad a su trabajo.
Arnold Schwarzenegger
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El actor se refiere a Red Sonja como “la peor película” de su vida, tanto así que, en tono de broma, asegura que la usaba como castigo para sus hijos cuando se portaban mal.
Sylvester Stallone
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A su contraparte en el cine de acción le pasó algo similar con ¡Para! O mi mamá dispara, una comedia que describió como “una de las peores películas del sistema solar”. Aunque hoy puede reírse de ello, en su momento, el fracaso fue amargo.
George Clooney
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El galán eterno vivió su propia pesadilla cinematográfica enfundado en el traje de Batman en Batman y Robin. No solo pidió disculpas públicas por su actuación, sino que también reconoció que casi arruina la franquicia que hoy domina la taquilla mundial.
Eddie Redmayne
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Aunque su actuación en The Danish Girl fue celebrada, hoy admite que ese papel debería haber sido interpretado por un actor transgénero, reconociendo el error de representatividad que años después sería uno de los temas más debatidos en la industria.