Las plataformas de streaming han ayudado a cientos de estudios, directores, guionistas, productores y actores ha surgir. Es cuestión de lógica. Antes de que se diera el boom de los catálogos digitales de entretenimiento, las grandes casas distribuidoras de Hollywood hacían entre 2 a 3 series al año, resultando un máximo de 12 proyectos realmente relevantes. Ahora, hay centenas anualmente.
En ese sentido, nos gustaría visibilizar tres ejemplos de actrices que comenzaron muy jóvenes en proyectos hechos especialmente para estos medios digitales enfocados en la pantalla chica, pero que gracias a su talento se han convertido actualmente en estrellas del cine mundial.
1. Millie Bobby Brown
Harper's Bazaar
Muchos conocimos a Millie Bobby Brown como una niña en el papel de Once en Stranger Things. Su poderosa actuación la catapultó a la fama, convirtiéndose en una de las actrices jóvenes más reconocidas y solicitadas de la actualidad. Ha protagonizado películas como Enola Holmes y Estado Eléctrico (también de Netflix) y ha participado en grandes producciones cinematográficas.
2. Anya Taylor-Joy
La Nación
La argentino-estadounidense Anya Taylor-Joy tenía 23 años cuando hizo Gambito de dama, pero su personaje le dio tanta fama que comenzaron a utilizarla en proyectos de gran envergadura tanto en TV, como en cine.
Por ejemplo, recientemente hizo Furiosa, de la saga de Mad Max o La bruja, de Robert Eggers.
3. Sydney Sweeney
The Hollywood Reporter
La mayor ladrona de suspiras del momento es, sin sombra de dudas, Sydney Sweeney. La actriz tenía tan solo 20 años cuando comenzó a grabar Euphoria y su inexperiencia se convirtió rápidamente en capacidad, mostrando cada una de sus habilidades frente a la pantalla en proyectos sumamente diferentes entre sí como Inmaculada, Con todos menos contigo, The Voyeurs o The White Lotus.